domingo, 22 de marzo de 2009

UTILIZA EL ORDENADOR CON INTELIGENCIA !



Algunas fuentes sitúan el origen de la palabra ERGONOMÍA, a mediados del siglo XX, cuando el psicólogo británico Hywel Murrell unió los términos griegos ergon (trabajo) y nomia (conocimiento), es decir el estudio de las leyes del trabajo, y bautizó la nueva ciencia. La Ergonomía, busca optimizar la unión del hombre con la máquina, es decir, que sean uno solo, que la máquina sea adaptable al usuario-hombre (usuario- estudiante), pero resguardando, preservando, la salud del ser humano, para buscar que haya una eficiencia conjugada. es por ello, que los usuarios, operadores de los ordenadores y demás aparatos tecnológicos, deben ser precabidos en la utilización de estas herramientas, toda vez, que son maniobrados de manera inadecuada, por ejemplo, cuando realizan un gimnasio - taller- o cualquier otra actividad de orden informático, colocan el aparato, sobre sus piernas, en una posición, que la espalda toma la forma "C", lo que perjudica notablemente la columna vertebral; también situan el P.C, sobre la cama y doblan las piernas durante largas horas, lesionando el sistema circulatorio , dando pie a que aparezcan las varices. No olvidemos, que la máquina debe adaptarse al hombre y no a la inversa.

TECLADO CON INCLINACIÓN NEGATIVA (FIG. 1)



Es considerado por algunos como la postura ideal para escribir en teclados, pues minimiza tanto las cargas musculares dinámicas como las estáticas.
Se alcanza esta postura cuando se ubica el teclado a una altura menor que la "altura del codo sentado" y se mantiene el teclado con una leve inclinación que lo "aleja" del usuario, de modo que se alcancen las teclas mas lejanas (los números y las teclas de función: F1, F2, etc.) manteniendo las manos en una posición neutra (natural).
En esta posición se logra una buena relajación de brazos, hombros, cuello y espalda, especialmente al hacer pequeñas pausas.
También se logra una posición levemente reclinada, con lo que la región lumbar (espalda baja) se descansa, apoyada contra el respaldo de la silla; el ángulo del codo, el ángulo del abdomen y el ángulo poplíteo (bajo las rodillas) se abren un poco, con lo que se facilita la circulación sanguínea hacia el antebrazo, la muñeca y la mano, y extremidades inferiores.


TECLADO SOBRE LA SUPERFICIE DEL ESCRITORIO (FIG. 2)



Es bastante común, en muchos puestos de trabajo, el escribir con el teclado ubicado sobre el escritorio.
En esta posición es muy difícil mantener la muñeca en una posición neutra (natural), debido a que los antebrazos comienzan a pesar a medida que el trabajo avanza, con lo que "traccionan" hacia abajo las muñecas, poniéndolas en una peligrosa posición de hiperextensión.
Más aún, muchos usuarios trabajan con los codos en flexión, lo que puede llegar a producir una compresión de los nervios mediano y cubital en el codo, y -además- restringir la circulación sanguínea hacia las manos.
Trabajar con los antebrazos levantados aumenta la carga muscular en las extremidades superiores, hombros y cuello, y llevará inevitablemente una notoria fatiga muscular si se persiste en trabajar en esta posición más de 3 a 4 horas.


BANDEJA PARA TECLADO BAJO LA MESA (FIG. 3)




BANDEJA PARA TECLADO BAJO LA MESA (FIG. 3)




Escribir en un teclado ubicado en una bandeja bajo la mesa también puede producir problemas posturales a los usuarios.
Es muy común ver que ciertos usuarios colocan su teclado apoyado en el borde la la bandeja, aumentando el ángulo natural de este.
En esta posición también es difícil mantener las muñecas en una posición neutra (natural), porque de todos modos sufren la tracción del peso de los antebrazos -a medida que el trabajador se cansa- lo que las pone en hiperextensión.
Los estudios realizados al respecto no han logrado demostrar que estas bandejas mejoren sustancialmente la posición de las muñecas.